El pasado mes de marzo recibí la propuesta de llevar a cabo una formación a los Equipos Directivos de una institución escolar. Sin embargo, no fue una institución cualquiera, sino de parte de la Congregación a la que pertenece mi centro: Hijas del Patrocinio de María. Concretamente, fue sor Petra Gómez quien contactó conmigo para invitarme a ser el formador en las Jornadas de Directivos de este curso recién acabado. Le pregunté que porqué había sido el seleccionado y su respuesta fue totalmente halagadora para mí: «¿Para qué buscar a alguien externo si lo tenemos entre nosotros?». Evidentemente, acepté encantado y comencé a reflexionar desde entonces sobre cómo orientaría los contenidos que estarían presentes en las once horas que duró la formación.
Por lo tanto, y como miembro del Equipo de Innovación de mi centro, decidí orientar las sesiones teniendo en cuenta los siguientes puntos:
- La dirección escolar en la escuela del siglo XXI.
- Roles de los agentes directivos.
- La figura del asesor pedagógico en los centros.
- El proyecto de innovación.
- Formación docente, metodologías y experiencias.
Creo que poder compartir estos puntos con los Equipos Directivos de los colegios ha sido una estupenda oportunidad para trasladarles la necesidad de ampliar perspectivas, funciones y exigencias no solo a nivel institucional o de personal, sino también metodológico y pedagógico. Existen diversos enfoques y opiniones que establecen que la tradición normativista de la gestión directiva ha «desprofesionalizado» tanto al personal directivo como docente. En consecuencia, creí oportuno abrir cierta reflexión en los miembros directivos acerca de la exigencia pedagógica y metodológica en los centros, a fin de gestionar las necesidades docentes para afrontar un proyecto de innovación con garantías y fiable. Para ello, insistí en que estamos en un momento importante en lo concerniente al concepto de Dirección escolar. Un momento en el que los objetivos o las competencias directivas no residen solo en la gestión administrativo-burocrática, sino también hacia el liderazgo pedagógico.